viernes, 29 de enero de 2021

El anticuario

Hace unos meses leí mi primera novela de Walter Scott. Nada más y nada menos que Ivanhoe. Esperaba que me gustara mucho y así fue. Desde entonces, tenía ganas de leer otro libro de este autor y me decanté por este El anticuario. Se trata de la tercera novela de Scott, después de Waverley y Guy Mannering.

Para empezar, hay que señalar que se trata de un libro completamente diferente a Ivanhoe. Si lo que buscamos es una historia llena de aventuras, caballeros, castillos y luchas encarnizadas, podríamos sentirnos defraudados. En El anticuario nos encontramos con una historia costumbrista protagonizada por un personaje principal encantador y una narración pausada donde se nos narran los pormenores de la vida de algunos habitantes de la comarca de Fairport, en Escocia.

Por supuesto, la historia también cuenta con emocionantes tramas y algún que otro giro inesperado, pero nada que ver con las grandes aventuras que Scott narraría años después en Ivanhoe. Lo que me más me ha gustado ha sido la relación de respeto y admiración entre Oldbuck y Lovel, y la forma en que Scott va entrelazando todas las tramas y personajes que van surgiendo alrededor del anticuario, y que poco a poco van confluyendo.

Quizás, lo que menos me ha gustado ha sido la desaparición de uno de los mejores personajes a mitad de la historia. Tampoco el final, algo atropellado, es de lo mejor, pues el autor opta por resolver todas las tramas en un escaso número de páginas. Pero son pequeños detalles que para nada empañan el resultado final. Desde que lo terminé, ya han caído en mis manos más libros de Sir Walter Scott y no creo que tarde mucho en ponerme con alguno.

domingo, 17 de enero de 2021

Otra vuelta de tuerca

Otra vuelta de tuerca ha sido mi primera lectura de 2021. Cogí este libro con mucha expectación, le tenía ganas desde hace años y no sé si habrá sido precisamente este hype lo que me ha impedido disfrutar de su lectura, habiéndose quedado finalmente como una experiencia algo decepcionante.

El libro nos cuenta la historia de una joven institutriz que acude a una mansión para hacerse cargo de la educación de dos hermanos. Una vez allí, comenzará a conocer las turbias circunstancias vividas en esa casa tiempo atrás, descubre que la anterior institutriz se suicidó y otro criado también falleció en extrañas circunstancias. La institutriz narra cómo comienza a presenciar unas apariciones, un hombre y una mujer que bien podrían ser los fantasmas de los fallecidos.

Mientras los niños parecen vivir ajenos a estas apariciones, la institutriz comienza a creer que los dos hermanos saben perfectamente de estos "fantasmas" pero prefieren ocultarlo. No quedará claro si lo que ve esta institutriz es real o si por el contrario es fruto de su imaginación. La turbia relación que establece con los niños, especialmente con el hermano mayor, nos muestran a una joven atormentada y asustadiza cuyas visiones bien podrían ser fruto de sus demonios internos.

En definitiva, una novela que entretiene, que marcó un antes y después en las historias de fantasmas y que tuvo mucha repercusión en obras posteriores, tanto literarias como cinematográficas (se trata de una obra adaptada al cine y la televisión en innumerables ocasiones). Todos estos ingredientes bien podrían haber hecho de este libro una lectura de mi gusto, sin embargo, como decía la principio, no me satisfizo plenamente. De Henry James ya había leído anteriormente Daisy Miller, una novela corta que tampoco dejó gran impresión en mí. Supongo que este escritor no es para mí.